miércoles, mayo 12, 2010

Ciudad

Voy a permitirme escribir esta entrada que no me ha dejado de seguir en la tarde, con el torrente que me va saliendo impulsado por la fuerza de mis dedos.

Vivian, quien pasó los últimos dos años en Buenos Aires me comentaba que no sabia mucho de Cali, de la nueva Cali, incluso, cuando le ofrecí una guia de servicios del MIO la recibió con agrado, pues manifestó que no se habia apropiado de este sistema publico que mueve casi trescientas mil personas diarias.
Creo que para Vivian quien vive ahora en Cali, ir de un lado a otro responde a una necesidad tecnica con un componente instrumental, mas que a la apropiación del acto del movimiento que incluye un componente de descubrimiento. Esta es la gran diferencia que existe entre transporte y movilidad

Me pareció harto evidente que no lo hiciera, Vivian tiene carro particular y se podria pensar que no tiene ningún sentido usar el MIO, pues ella "facilmente" se puede mover por la ciudad haciendo uso de la particularidad.

Al contrario, mientras estuvo en Buenos Aires, aunque tambien trabajaba, estudiaba y se divertia, hacia uso del sistema basico de movilidad, su propios pies o de sistemas un poco mas elaborados, como el metro o el bus, haciendo que su relación con la ciudad fuera distinta.

Siempre me han gustado las historias de caminantes de ciudades, que han conocido los cafes mas exoticos y las calles mas tipicas y reconditas, gracias a esa acción de autonomía que dan los pies. Por mi parte en mis pocos y cortos viajes, me he visto disfrutando del camino hacia los lados y no hacia adelante como se estila cuando eres un conductor.

Ahora que no he podido hacer uso de mi motocicleta (pues he perdido mis documentos, pero esa es otra historia) me he vuelto un asiduo usuario del transporte público: del gusano azul y de la tortura verde coomoepal.

La relación que instauré con la ciudad ha sido otra luego de este desafortunado suceso de la perdida de mi identidad ciudadana y financiera, pues asumí la vida de la ciudad en torno a la vida "publica" de la ciudad y al poder de decidir, si tomar mi transporte particular (haciendo uso de la ilegalidad) o el transporte público, entendí que la vida de la ciudad se vive viviendo lo público.

Es una conclusión obvia para los viajeros y ellos te lo pueden decir, las ciudades en las que han morado, sea por cinco días o tres años, solo pueden ser vividas caminandolas o en sus Metros, en sus buses, ¿en su sistema masivo halado por caballos?, en lo que sea...pero en lo público.

La vida de la ciudad real es pública, no privada. He pensado que en Cali se hace necesario amalgamar la vida privada, tu vida desinteresada con la vida de la ciudad. Lo reitero una vez mas, es pública...no sobra decirlo, la vida de la ciudad es pública, se vive desde lo público.

Tu proyecto de vida ya no sería tu aspiración personal - quiero un carro pa moverme por onde me de la gana, quiero una moto para subirme a los andenes y pisar la mayor cantidad de peatones que pueda, voy a vivir en una unidad residencial con unos muros bien altos yconunvigilanteconcarafeayconpistolaqueamenaceatodoslosquemequieranrobaryhacermedaño, e irme de este país en donde todo se lo roban y no ver a ningun colombiano mas, pues todos son ladrones y mentirosos y en donde la culpa de todo lo que nos pasa es de chavez o de uribe o de los negros o de los indios o de los pobres o de los ricos o de cualquiera.

Cuando tu proyecto de vida está amalgamado en lo público, dejas de ser un individuo unido a la vida de la ciudad y te tranformas en una ciudad hablando por la boca de un individuo.

Gracias a Vivian (aunque no me lees) por permitirme esta elucubración luego de la discusión contigo el día de mi cumple.