El día finalmente se llegó y la tarea aunque me generaba cierta ansiedad, salí al paso con la tranquilidad de tener las herramientas necesarias.
Salí de la casa con los aperos necesarios: Dos juegos de baterías AA y su respectivo cargador, trípode, flash, tarjeta de memoria y el flamante sol artificial "speedlite 430 exII"; se supone que era lo suficiente (aunque me hubiese gustado llevar un teleobjetivo) y lo necesario
La iglesia no estaba muy llena, sería una ceremonia intima, la familia, algunos amigos. La gran parte de los invitados eran desconocidos para mi, situación que me suele dar un poco mas de tranquilidad pues puedo moverme con mas soltura y hacer las tomas que quiero sin hacer pensar a mis modelos que los estoy persiguiendo o acosando.
Escenas típicas se iban facilitando: la llegada de la novia tomada con la ayuda del trípode en una oscuridad sin fondo, unos padres de la novia felices y radiantes, una novia dichosa, el novio ansioso, amigos sonrientes, niños traviesos, varios juegos de puesta en escena que pude ir armando, soltandome, yéndome en ese embriagador ritmo propuesto por la orquesta de obturador, cortinilla y estruendo de flash. Ya era uno con mi cámara, ya reptaba por los techos, aparecía aquí y allá, era liquido, incoloro, invisible.
El flash golpeaba tantas veces en el techo y rebotaba tan suavemente sobre los invitados de ese enorme templo, que fue necesario aumentar la potencia del cuadrado sol artificial, ante semejante demanda era de esperarse que se agotara muy rápido el primer stock de baterías.
La tarea de recarga hubiese sido mas sencilla o menos traumatica, como prefiera señor, señora, joven o niño usted leerlo o sentirlo, si justo en ese momento no me encontrara en el extremo opuesto de donde había dejado mi maletín de trabajo y si en ese momento los novios (ahora esposos) estuvieran dando sus respectivos votos.
No hay que explicar lo que significa esto. Pero retomemos el sentido de este tutorial, hasta el momento he usado bien usado: trípode, dos juegos de baterías y un buen flash...parece ser lo necesario y lo suficiente.
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En las paginas que visité sobre como fotografiar una boda, no encontré una que indicara el protocolo de vestimenta ni tampoco el rol profesional del fotógrafo-amigo. Por tanto, ese día decidí usar mi pantalón y mi saco negro, acompañándolo de mi bella corbata fucsia (oh corbata, gran elemento de trabajo).
Aun vestido como estaba, no escatimaba esfuerzos en lanzarme al suelo para hacer una que otra toma en contrapicada, era un rebelde sin causa armado de una cámara fotográfica y, por "la prudencia que hace verdaderos sabios" no sería reconocido en el mundo de las fotos de eventos.
hagamos acá una nueva lista de los objetos que de manera suficiente y necesaria, definitivamente debes llevar para una boda: Tripode, dos o tres juegos de baterías recargables, flash...
O sorpresa me dijo Aura después:
-Yo vi que te lanzaste al suelo y luego escuché un ruido del que no supe su origen, pero como todos sabemos que vos sos así, como medio histrionico pues no le di mayor importancia, luego volví a ver lo que estabas haciendo y cuando te estabas levantando del suelo vi lo que no debía ver...
Añadan a la lista de objetos suficientes y necesarios: Pantalón extra....
Se abrió el pantalón desde la rodilla hasta donde comienza la pretina, allí fue donde la corbata entró en escena y, recordando las mil escenas de películas de guerra que vi en mi infancia, amarre la corbata de mi pierna cual si estuviera deteniendo una grave hemorragia.
(hemorragiafalicahemorragiafalicahemorragiafalicahemorragiafalicahemorragiafalicahemorragiafalicahemorragiafalicahemorragiafalicahemorragiafalica)
Veronica me dijo despues:
Lucho, yo te conozco mas bien poco, sin embargo yo sé que sos como medio raro y haces tus cosas raras y cuando vi que tenias la corbata amarrada en la pierna, pues me dije: "otra de las cosas de lucho" y le resté importancia.
Terminó la boda y aun estando enfrente de todos fui invisible, nadie vio el roto de mi pantalón pero si una corbata amarrada a mi pierna. Aun así, quiero dar este testimonio para que sirva de consejo: aunque nadie se fije en ti porque eres el fotografo y nadie vaya a ver tu ropa interior, lleven un pantalon extra a su sesión de fotos, su familia, sus amigos y la patria se lo agradecerá
De izquierda a derecha: Aura, Ivonne la novia, Verónica y yo
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